En este día de año nuevo, un suceso sobrecogedor está llenando los contenidos de los medios. En la región de Kiamba, en Kenia, 30 personas según datos de Reuters han muerto calcinadas en una iglesia. La situación en Kenia ha dado un vuelco total desde que se celebraron las últimas elecciones. El partido de la oposición dirigido por Raila Odinga acusa al partido vencedor liderado por Mwai Kibaki de haber obtenido 300.000 votos fraudulentos. Ante la continua deslegitimación de las elecciones y del partido vencedor, el conflicto político se ha trasladado a enfrentamientos en campo de batalla.
Según AFP, la lista de muertos en los enfrentamientos se hace constar ya en 289 mientras que el gobierno keniata proporciona informaciones de 148 fallecidos.
Esta situación se repite en Kenia cada vez que se da la época post electoral y supone un grave problema para observadores internacionales que confiaban en que el país siguiera una trayectoria más estable y por tanto la esperanza de una democracia real africana.
Según AFP, la lista de muertos en los enfrentamientos se hace constar ya en 289 mientras que el gobierno keniata proporciona informaciones de 148 fallecidos.
Esta situación se repite en Kenia cada vez que se da la época post electoral y supone un grave problema para observadores internacionales que confiaban en que el país siguiera una trayectoria más estable y por tanto la esperanza de una democracia real africana.
Episodio de violencia en el conflicto (Rue 89)
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